La empresa italiana Vegea ha podido transformar los desechos del orujo de vino en un cuero vegetal 100% ecológico.
Se ha servido de los aceites vegetales y de las fibras que contiene los restos del vino, para sacar un producto innovador gracias a una gran investigación con técnicas punteras.
INVESTIGACIÓN Y CIENCIA
Este cuero vegetal triunfó en los Global Change Award del año 2017, promovidos por la Fundación H&M. Unos premios internacionales cuya misión es galardonar aquellas invenciones que pretender mejorar la sostenibilidad del mundo de la moda.
El arquitecto Gianpiero Tessitore fue el gran inventor de este cuero vegetal. Le costó un estudio de tres años para poder examinar las propiedades físicas y mecánicas de este nuevo material, y que fuesen similares a las del cuero animal, incluso su tacto y su estética.
Un concepto innovador que lo patento en junio del 2016, con una materia prima procedente de la piel, semillas y raspas de la uva que quedan al realizar el proceso de fabricar vino.
¡Que buen invento!