Si sabés cómo alimentarte bien, tu calidad de vida mejorará considerablemente. Te dejamos cinco consejos para poner en práctica.
- Elegí siempre alimentos saludables. Evitá agregar al plato más comida de la necesaria. Intentá mantener una cantidad más pequeña.
- No bebás calorías. Mucha gente olvida cuántas son las que contienen la mayoría de los refrescos y bebidas. Tratá de limitar las carbonatadas y con azúcar y, en su lugar, bebé agua.
- Evitá comprar alimentos cuando estés con hambre. En esta circunstancia, cuando el estómago manda sobre el cerebro, es difícil tomar una buena decisión alimentaria. Comprá en establecimientos que tengan buenas ofertas. Además de ser más baratos, casi con seguridad serán más sanos.
- Cuando se cocinen los alimentos, asegurate de eliminar la grasa. Si se trata de un guiso, eliminá la capa superior en la que se acumula y, si son fritos, ubicalos antes sobre papel de cocina, para que la grasa sobrante se absorba. Agregá a tu dieta frutas que te gusten.
- Tratá de comer más veces al día y en menor cantidad, alrededor de cinco ingestas diarias. Llevá siempre en la mochila algún snack saludable y, así no te encontrarás tan hambriento al final del día.